Por: Nutrición Inteligente
Si respondiste sí, a alguna de las 2 preguntas, puedes estar sufriendo de Síndrome de Candidiasis Intestinal Crónica.
La Candidiasis es una infección producida por una levadura que vive de manera normal en nuestro organismo, en la piel, aparato digestivo, respiratorio y genitourinario. Su función es absorber metales pesados para evitar que entren a nuestro sistema circulatorio, nos ayuda a digerir azúcares y mantiene el equilibrio de la flora intestinal. Cuando se dan las condiciones y se produce un desequilibrio inmunológico, se produce una alteración de estos microorganismos que los convierte en hongos, ocasionando múltiples trastornos en distintos niveles de nuestro organismo.
Existen una serie de factores, tanto internos como externos, que pueden deprimir nuestro sistema inmune y/o desequilibrar nuestra flora intestinal provocando el desarrollo del Síndrome de Candidiasis Intestinal Crónica (CIC), estos factores son:
1) Consumo excesivo de carbihidratos: Los hongos se alimentan fundamentalmente de azúcares. Estas pueden provenir del consumo excesivo de harinas (tallarines, pan, pizzas, etc.) o por el consumo excesivo de frutas, cereales refinados, azúcar refinada o productos que la contengan como bebidas, postres, dulces o preparaciones de repostería, los que permiten que estos hongos tengan una mayor chance de alimentarse y crecer.
2) Tratamientos extensos o a repetición de antibióticos: Los antibióticos además de combatir las infecciones, destruyen nuestra flora intestinal beneficiosa, generando un desequilibrio de los microorganismos que viven en nuestro intestino, permitiendo que los hongos se reproduzcan con mayor facilidad.
3) Durante el embarazo: En esta etapa los niveles de la hormona Progesterona aumentan, generando elevaciones de la glicemia (azúcar) en sangre, lo que favorece el crecimiento de hongos.
4) Situaciones de estrés: En respuesta al estrés, nuestro organismo secreta una hormona llamada Cortisol, la cual deprime nuestro sistema inmune, aumenta los niveles de azúcar y destruye nuestra flora bacteriana intestinal, todo esto favorece el crecimiento de los hongos.
5) Malnutrición: Necesitamos un buen aporte de nutrientes para mantener nuestro sistema inmunológico en buenas condiciones, regular nuestras hormonas, secretar enzimas digestivas y regular el azúcar en sangre, todos factores muy importantes para evitar el desarrollo de hongos.
Diagnóstico:
En Nutrición Inteligente contamos con un examen específico para la detección del Síndrome CIC, éste permite definir la presencia de cualquier especie de Cándida a nivel intestinal. La detección se realiza a través de análisis de heces, donde se le solicita al paciente una muestra fecal y se analiza utilizando las técnicas de cultivo y de identificación de especie. Este procedimiento es llevado a cabo en el laboratorio de análisis micológico de la Universidad Mayor.
El resultado de éste examen junto con la evaluación completa del paciente permite realizar un diagnóstico certero y oportuno.
Tratamiento:
El tratamiento de esta enfermedad debe ser integral, contemplando alimentación, suplementación y el uso de productos naturales antimicóticos. El enfoque esta orientado a la eliminación del Síndrome CIC y a evitar la reaparición de éste.
Dieta: La alimentación es un pilar fundamental en el tratamiento de este síndrome, ya que los cambios en ésta van a provocar que se debilite la cándida y que disminuya la inflamación intestinal que se produce por su presencia y que genera síntomas indeseables. Logrando que el paciente tenga una mejor evolución en las siguientes etapas del tratamiento, en las que se aplican otras herramientas de erradicación.
La alimentación debe ser reducida en azúcares, con el fin de mantener el azúcar sanguíneo en niveles normales que eviten el crecimiento de la cándida, excluyendo aquellos alimentos que la contengan como el consumo de frutas en exceso, harinas o productos derivados y el alcohol.
Un buen aporte de proteínas es fundamental en este tipo de pacientes, ya que las proteínas poseen un mayor poder de saciedad y potencian el sistema inmunológico.
Dentro de los líquidos a ingerir se recomienda evitar el uso de agua potable, ya que contiene cloro y flúor que destruyen nuestra flora intestinal y deprimen nuestro sistema inmune. Se recomienda consumir agua filtrada o purificada.
Suplementos:
Se necesitan mayores proporciones de Vitaminas y Minerales con el fin de potenciar el sistema inmune y promover la regeneración de tejidos. En Nutrición Inteligente no utilizamos medicamentos antimicóticos alopáticos, debido a que son tóxicos a nivel hepático, lo que muchas veces empeora el estado de salud inicial y como el tratamiento es largo, puede producirse resistencia al medicamento y ser inefectivo a largo plazo. Por lo tanto se utilizan sustancias de origen natural que sean selectivas en el ataque a la infección.
Para combatir la Cándida, en Nutrición Inteligente se utilizan suplementos de palo de arco, ajo y/o ácido caprilico, los que han mostrado una excelente efectividad, los que utilizados en conjunto con los nutrientes específicos que la nutricionista determine en la consulta, le ayuden a restablecer la salud general de la persona.
El tratamiento de erradicación es de lenta evolución y en su transcurso genera malestares producto de la desintoxicación, como mareos, dolores de cabeza, hinchazón, fatiga o cansancio general que interfieren en la calidad de vida del paciente. Estos síntomas desaparecen dentro de los primeros 15 días en la mayoría de los casos. Pero se requiere rigurosidad y perseverancia por parte del paciente, además de la asesoría de un profesional capacitado.
Conclusiones:
La presencia de uno o más de los síntomas antes mencionados, pueden estar asociados a la infección porCándida y afectar su calidad de vida, de ahí la importancia de un diagnóstico temprano con el fin de realizar un tratamiento individualizado. Es indispensable que el problema se analice de manera integral, con el fin de evitar la reaparición temprana de la infección.
En Nutrición Inteligente contamos con todas las herramientas necesarias para el diagnóstico y apoyo al tratamiento de erradicación de Cándida, mejorando la calidad de vida de nuestros pacientes y otorgándoles el apoyo que se requiere durante todo el proceso.
Bibliografía
1) La Nutrición Ortomolecular, Cala H. Cervera.
2) Cándida Albicans, Cala H. Cervera.
3) The yeast connection. William Crook.